FRANCISCO PINO. (Valladolid, 1910 -2002)
El 18 de enero de 1910 nace en Valladolid Francisco Pino Gutiérrez. Su familia, dedicada a la exportación y al comercio, le infundirá una profunda fe en la religión católica. En 1918 ingresa en el Colegio de Lourdes, donde realiza los estudios primarios, y entre 1924 y 1927 estudia bachillerato en el Instituto Zorrilla. Se licencia en Derecho por la Universidad de Valladolid en 1931. Amplía su formación en Derecho Mercantil en diferentes estancias en Inglaterra y Francia, al mismo tiempo que entabla valiosos contactos con las vanguardias europeas.
Mientras realiza sus estudios superiores, Francisco Pino comienza su andadura literaria. Crea las revistas Meseta (1928), junto a José María Luelmo, Ddooss (1931) y A la nueva ventura (1934).
En 1935 se traslada a Madrid para preparar una oposición y continuar sus estudios de Filología Francesa, será allí donde el comienzo de la Guerra Civil lo sorprenda. Debatiéndose entre su férreo catolicismo y su militancia como republicano, Pino se niega a combatir en uno y otro bando. Los años de la guerra los pasa entre diversas cárceles y periodos de libertad que le permiten conocer a María Jiménez Aguirre, con la que se casa en 1947 y con la que tendrá un único hijo.
Tras la guerra, se ve obligado a desempeñar ciertos cargos en la Presidencia del Gobierno y en Organizaciones Juveniles de Madrid. Concluidos estos compromisos, continúa su actividad mercantil y, después de su matrimonio, se instala en el Pinar de Antequera en Valladolid. Será entonces cuando Francisco Pino se dedique más intensamente a la creación literaria, aislándose voluntariamente de la vida pública.
Su obra literaria ha sido merecedora de premios como el de las Letras de Castilla y León en 1989 y el de la Trayectoria Literaria de la Diputación de Valladolid en 1993. Muere en Valladolid el 22 de octubre de 2002.
Información obtenida de: Fundación Jorge Guillén
------------------------------------
Advertencia
En silencio
como el río,
en silencio,
largamente
como el chopo,
largamente,
por tu amigo
el enemigo,
por tu amigo
vas a llorar
te lo digo
en silencio,
lar
ga
mente.
De "Versos para distraerme" 1982
Así, prendido de la espesa rama...
Así, prendido de la espesa rama
como a nuevo Absalón me viste atado.
Oh espesa rama que me tiene alzado
a un viento vivo que ternuras brama.
Oh viento! ¡Oh toro! ¡Oh llanto! ¡Oh luna! ¡Oh llama!
que a mi cuerpo con saña has castigado;
ya como vaso, de dolor sobrado,
mi corazón sangrando se derrama.
¿De qué torturas dulces eres río,
árbol crecido en tierras de desvío,
cielo con ramas de sutil locura?
Espero muerte viva, fuego frío,
de tu lanza de fino desvarío;
clavado corazón: dicha insegura.
Francisco Pino
Ausencia
Solitario campo.
Me encuentro conmigo.
Soy mi descampado.
Solitario cielo.
Me encuentro conmigo.
Soy mi desanhelo.
Solitario alud.
Me encuentro conmigo.
Soy mi multitud.
De "Versos para distraerme" 1982
Francisco Pino
El pañuelo
El pañuelo; te hallabas en un fondo
donde el trajín y un ruido de bielas
y corales, delfines, algas y
azucenas, acacias, te incorporaban para...
No, adiós no le decías
a nada; tu pañuelo
dormido reposaba en tus antaños,
sin futuro en su entraña.
Oías los murmullos, los silencios,
los grandes estruendos, explosiones,
tú, pero tu pañuelo que dormía
seguía sin decir adiós a nada.
Oyendo en la penumbra los corales,
oyendo en la penumbra las bielas,
oyendo en la penumbra las penumbras,
oyendo en la penumbra las acacias,
tu pañuelo, un Edipo, un dios y un asa
en el ayer te anclaba,
tan quietísimo.
¡Ay!, con qué adiós de mármol en su lienzo.
De "Claro decir" 2002
Francisco Pino
Esta tierra
No me busques en los montes
por altos que sean,
ni me busques en el mar
por grande que te parezca.
Búscame aquí, en esta tierra
llana, con puente y pinar,
con almena y agua lenta,
donde se escucha volar
aunque el sonido se pierda...
Francisco Pino
Ramo de lilas
Me han traído unas lilas...
...son blancas... y dan tan hondo olor...
...me llevan hasta mi mujer ya muerta...
...las plantamos los dos juntos al fondo
...del jardín.
...Sobre mi mesa están ¡Qué camafeo!
{unidas
... {cortadas en un búcaro
{dolidas
...penden, como ella misma, hacia el dolor...
...en mi dolor y el dolor
...del jardín...
...ya sin ellas..., ¡Sí, como ella, sí, este ramo!...
...el amor que la tengo a lilas huele tanto...
...a las lilas que blancas plantamos los dos juntos...
...para el recuerdo de hoy, el pulso
...del jardín...
De "Claro decir" 2002
Francisco Pino
Sima de amor
Resbalando por esta sima umbrosa,
yendo sin freno el pie tras la mirada,
la mano tanteando en piedra helada,
y presa la mirada en lumbre hermosa,
por esta sima voy. ¿Qué luz undosa
de antorchas te me muestra, mi ignorada?
¡Oh inofensiva unión y peligrosa
la de la llama a la pupila atada!
Todo al revés se ve, y a la deriva,
por esta oscuridad que luz trasciende
donde el misterio del amor estriba.
Y si la muerte siento que en mí prende,
también me gozo al verla ardiendo viva
si los caminos de tu alma enciende.
Francisco Pino
Símbolo
Te adoro nube porque eres
símbolo mío en la tarde,
púrpura que acaba en nieve,
nieve que acaba en el aire...
¡nada entre tanto combate!
Sangre que afluye a las sienes,
sienes que en sueño se abaten...
-¿Quién te venció sin rehenes?
Francisco Pino
Y la vida
Y la vida, la vida es un instante
mas cual millones de mayos perdura,
cae pronto y se levanta
pronto. No es un olvido.
Quien ve amanecer ve lo bastante;
una luz, el rocío,
ese Dios que ahora calla
dentro. No es un olvido.
Un instante lo es todo si oscurece.
Quien ve oscurecer contempla como
la muerte de una rosa que no muere
nunca. No es un olvido,
es un rostro que ciego ve una flor.
De "Cuaderno salvaje" 1983
Francisco Pino
Un robot no envejece
-
Un robot no envejecey ni siquiera tiene sentimientos. Su mente positrónica
se rige por tres leyes: «Proteger al humano.» «Obedecer sus órdenes(siempre
que ...
Hace 11 horas
Pino, quizás el poeta en estado puro .
ResponderEliminar